PUNTO CRÍTICO/Gabriel Torres Espinoza
La policía de Tlaquepaque fue intervenida al inicio de esta semana. ¿La razón?, la sospecha de infiltración por parte del crimen organizado.
Bajo este mismo ‘sospechosismo’, prácticamente todas las corporaciones policiacas de la zona Metropolitana de Guadalajara podrían ser desarmadas e investigadas, pues es bien conocido que el poder económico corruptor de la delincuencia organizada enraizó entre los cuerpos policiacos.
En efecto, Tlaquepaque registra una espiral de violencia, especialmente con ejecuciones.
También debe observarse que la mayoría de los cuerpos que aparecen en este municipio, no corresponden a personas que vivan en San Pedro Tlaquepaque. Dicho de otra manera, los dejan ahí, por alguna razón…
Tampoco hay que perder de vista que la violencia y las ejecuciones, son un fenómeno que ocurre en todo Jalisco, como en otros estados donde se agudizó la fuerza del crimen organizado.
La violencia en Tlaquepaque no es la excepción. Es, en todo caso, la constante. De cara a esta realidad, que el mismo gobernador advierte que no se detendrá pronto, lo que se requiere es coordinación y mucha responsabilidad de todos los actores.
Politizar las estrategias, acertadas o poco afortunadas, no hace sino dejar en evidencia que mientras el crimen está perfectamente organizado, las fuerzas públicas de seguridad, y especialmente quienes las dirigen, no atinan a establecer una agenda mínima que atempere la violencia.
¿A quién le conviene que los gobiernos municipales, el gobierno de Jalisco y la federación no muestren disposición para actuar de forma coordinada? ¡Acertó!, justo a los grupos criminales.
Al fin que los altos gobernantes tienen escoltas y patrullas que les ofrecen protección. Tal vez por ello, por que no son blanco de la delincuencia que padecen sus gobernados, es que actúan con tanta ligereza a la hora en que tienen que cerrar filas para atender el problema.
Ahora bien, ¿de que tamaño es el asunto con las policías? El 15 por ciento de los 11 mil 705 elementos de seguridad pública municipal del Estado de Jalisco, que han sido evaluados por las pruebas de control de confianza, han reprobado los exámenes, de acuerdo con los últimos datos proporcionados por el Centro de Control de Confianza del Estado de Jalisco.
Hasta los primeros días de marzo, sólo faltaba evaluar a 6% del universo total de estos policías (12 mil 453).
Se han registrado, al menos, 14 ocasiones en que se ha intervenido para desarmar policías municipales. Veamos algunos casos. En 2014 se desarmó a las policías municipales de Cocula [45 elementos] y Casimiro de Castillo [26 elementos]. En 2017, fueron desarmados policías municipales en Ocotlán [93 tantos].
En ese mismo año, también fueron desarmados policías de Tlajomulco de Zúñiga [90 policías de la Zona Metropolitana de Guadalajara]. Ahora, en 2018, 734 policías de Tlaquepaque fueron desarmados, en el caso más voluminoso de intervención por sospechas de infiltración.
Las fuerzas estatales realizaron el desarme de los elementos de las corporaciones municipales, basados en la atribución que tiene la Fiscalía General del Estado -FGE- de otorgar y revocar licencias de portación y uso de armas de fuego.
Empero, en un Estado de Derecho, no se puede violentar la autonomía municipal argumentando “la sospecha de posibles infiltraciones del crimen organizado”. El ‘sospechosismo’ no justifica nada. Esto es, no debe emprenderse sanción o intervención si no existe una causal que la funde o motive. Menos basada en una “sospecha posible”.
¿Dónde están ahora los imputados, las averiguaciones previas, los procesos penales iniciados? Se entiende que en un operativo sorpresa para desarmar una policía, que se presume infiltrada, no se le avise previamente a las autoridades locales.
Pero, 48 horas después no tenían la obligación (en razón de su cargo) de expresar a la Alcaldesa los motivos de la intervención. Este ‘operativo’ resultó de una torpeza increíble. Especialmente, porque se filtra a la prensa ayer que “Hallan narconómina en Tlaquepaque”. Será que los interventores de Tlaquepaque, ¿ya tienen detenidos?
O dejaron que se supiera eso ¿para que se fugaran?…
