AP.— El pintor y escultor Fernando Botero, cuyas figuras voluminosas se convirtieron en un emblema del arte colombiano dándole la vuelta al mundo y facturando millones de dólares en subastas, falleció el viernes. Tenía 91 años.
El deceso fue confirmado por su hija Lina Botero, quien dijo a Caracol Radio que su padre había fallecido el viernes por la mañana en Mónaco por complicaciones de una neumonía.
Botero retrató políticos, animales, santos y escenas de su infancia en una forma regordeta y colorida que era reconocible al instante. Durante su vida el artista alcanzó fama e influencia mundial a pesar de su origen humilde y sus pinturas fueron exhibidas en museos de todo el mundo, mientras que sus imponentes esculturas de bronce se pueden encontrar en los parques y avenidas de muchas capitales europeas y latinoamericanas.