El Museo de Cera de Madrid ha presentado este martes su estatua del nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tres días antes de que comience su legislatura. La figura, de 1,91, 250 gramos de pelo y una piel más pálida que la que suele lucir en televisión, ha sido recibida por una activista de Femen con el pecho descubierto, que ha exigido «coger de las bolas al patriarcado».
La activista, en la línea de otras acciones que suele protagonizar el grupo feminista Femen, surgió entre los medios que asistían en el patio del museo, en la madrileña plaza de Colón, decorado con banderas de Estados Unidos, alfombra roja y globos.
Allí, la mujer, una joven con gafas y el pelo en una coleta, se despojó de la cazadora gris que vestía y encarándose con la estatua de Donald Trump gritó «hay que coger de los huevos al patriarcado». Vestida con unos pantalones burdeos y botas negras, la joven llevaba escrito en el pecho con letras negras grab back y en la espalda grab patriarchy by the balls, frase que ha gritado en inglés y luego en español y que como se señala anteriormente significa «coger las bolas al patriarcado».
El portavoz del museo, Gonzalo Presa, intentó taparle los pechos primero con la gorra roja que lucía Trump, después con la cazadora que ella había tirado al suelo y más tarde con los globos que jalonaban la alfombra roja que conducía a la escultura. La mujer, que se zafó del responsable, y llegó a la figura y mientras gritaba varias veces el eslogan mencionado tomó en varias ocasiones por la entrepierna a la escultura de Trump. A final los trabajadores del museo la han cogido por los brazos y la han llevado fuera del patio por una de las escaleras.
Presa ha señalado que le daba «mucha lástima una situación tan desagradable», y que Trump era «un presidente como otros tantos». Mientras Femen reivindicaba en un tuit la acción con el mensaje: «Femen acaba de agarrar por las pelotas a la figura de Trump en Madrid! grab patriarchy by the balls». (Con información del Pa[is)
