Degustar un platillo gourmet es un lujo que hoy día pueden experimentar los comensales fuera de un restaurante, pues ahora tienen la oportunidad de hacerlo a 30 mil pies de altura. Sí, la batalla por romper el esquema de que la comida en los aviones suele ser poco apetitosa y la estrategia de las compañías aéreas por brindar mejores servicios a bordo las lleva a contratar a los mejores chefs del mundo para conquistar a sus viajeros con menús de alta gastronomía.
Es así que empresas como Air France ofrecen a sus clientes platos del chef estrella Daniel Boulud, cuyo restaurante en Nueva York cuenta con tres estrellas Michelin. Además, la aerolínea gala ha reforzado su oferta con las propuestas de cocineros reconocidos como Régis Marcon, Michel Roth y Guy Martin.
“Se tiene esta concepción de que la comida del avión viene de una cadena industrial donde ya todo está hecho y lo que queremos es justamente lo opuesto”, asegura el chef mexicano Enrique Olvera, quien junto con el Colectivo Mexicano de Cocina está encargado del diseño de los menús para los vuelos de Aeroméxico.
En un video utilizado por Aeroméxico para dar a conocer su oferta gastronómica a bordo, el experto en gastronomía dijo que lo que se busca es hacer una comida diferente a la de otras aerolíneas y que se pueda servir en cualquier restaurante del mundo.
Es gracias a esta alianza, que se concretó en 2014, que los pasajeros nacionales e internacionales pueden degustar combinaciones de ingredientes que enaltecen la comida mexicana, nombrada por la UNESCO como Patrimonio Cultural In- material de la Humanidad, con una propuesta de salmón con salsa veracruzana acompañada de arroz jazmín, aceitunas Kalamata y jitomate cherry, por ejemplo.
