POLÍTICA SIN ÉTICA/Jonadab Martínez
Desde que hizo su anuncio de manera formal, Guillermo Cienfuegos mejor conocido como Lagrimita, tenía como principal cometido, hacer guerra sucia a Enrique Alfaro, y siendo escéptico, dudo mucho que no haya logrado el número de firmas que requería para ser candidato a presidente municipal de Guadalajara, creo firmemente en la teoría que se le estaba cayendo el treatrito al PRI y decidió bajar a su candidato “independiente” porque restaría votos al mismo PRI.
Afirmo lo que publica Eugenia Barajas en su blog “La Mendiga Política”: “Esta información abre dos escenarios, si fuera cierto que el PRI o el Gobierno del Estado son los artífices que se encuentran detrás de Lagrimita, ¿qué los orilló a “bajarlo” de la contienda? Pudiera ser la posibilidad que el payaso les restara votos a los tricolores en las zonas del oriente de la ciudad, espacio donde tienen su voto duro y donde es mayormente conocido y reconocido este personaje, podría ser un escenario.”
Durante la recaudación de firmas para el registro de Lagrimita, un joven acudió a mi hogar y me pidió el apoyo por el payaso que pretendía ser candidato a presidente municipal, no accedí pero le pregunté al joven que sí a ellos les pagaban o a cambio de que estaban ayudando a Lagrimita, después de preguntarle, el joven me mostró su credencial de estudiante y me dijo que algunos prestaban su servicio social, otros estaban realizando sus prácticas “profesionales” y que a otros les daban puntos por acudir. Desde ahí supe que todo era una farsa, un gran complot en contra del candidato puntero Enrique Alfaro.
No era fácil sacar conclusiones, Ricardo Villanueva, candidato del PRI del que se presume cuenta con el apoyo de las autoridades de la Universidad de Guadalajara, y menciono autoridades porque en la comunidad estudiantil hay un repudio generalizado, y por otro lado, decenas de jóvenes estudiantes de la Universidad de Guadalajara colocando calcas en los cruceros de Guadalajara a favor de Villanueva, ¿era mucha casualidad, no?
En lo personal me hubiera gustado que el circo durara un poco más, y que la causa fuera el repertorio de pruebas que almacenó Movimiento Ciudadano de la comparsa de Lagrimita y el PRI, hubiera sido un genial capítulo de la historia, lástima que se nos adelantó Lagrimita a no “cumplir” con las firmas para ser candidato.
Ya que Lagrimita se bajó, lo bajaron o como dijera Calderón: “haiga sido como haiga sido”, Cienfuegos se va a su casa con la cola entre las patas, y con el abucheo del público.
“que barato, que barato” le salió a Guadalajara porque íbamos a financiar la campaña de un payaso que solo iba a ser palero del PRI y de su candidato Ricardo Villanueva.
