Al maestro con cariño

ME LLEVA LA… CULTURA

La Irredenta Irredenta

 

Quiubole mis querid@s efímeros cómo les fue esta semana?

A mí muy mal, con esta lluvia que ni es temporal ni es nada, me han dolido mis huesitos, (que son muchos y es lo único que tengo) pero ya me recomendaron un remedio de curcuma que a ver si me funciona.

Y bien, hoy quiero empezar este comentario felicitando a los maestros, pero a los de adeveras, aquellos que con real vocación han sufrido todo este año pasado por no poder apoyar como acostumbran a sus alumnos; los que han sufrido con ellos el tedio de la computadora y con otros la falta de medios (económicos y tecnológicos) para poder seguirles impartiendo sus respectivas materias, aquéllos que se han preocupado en ocupar su tiempo en hacer su carrera magisterial y no en otras acciones que llegan a concluir hasta en tragedias.

Ojo, yo no digo que estos últimos no tengan razón, eso solo mi Jefe, los suyos y ellos lo saben, pero sí de plazas directas se trata, estoy de acuerdo, pero que empiecen por los que terminaron la carrera hace 20 años y aun sigue cubriendo interinatos.

Ahora que aprovechando la ocasión y lo que ellos merecen, déjenme platicarles una anécdota relacionada con los maestros y es acerca de ¿por qué? se les obsequian manzanas:

Empezaré por decirles que la manzana tiene varios significados simbólicos por sí misma: por ejemplo para los griegos, germanos y celtas y por las muchas propiedades naturales que posee representa la belleza femenina, también la inmortalidad.

Por aquello de Adán y Eva, la manzana es la fruta que simboliza la fortaleza durante el aprendizaje y ha sido asociada con la educación desde hace siglos. El ejemplo más claro es que el árbol del conocimiento instalado en el Paraíso era una planta de manzano, y podría decirse que representa el pecado, (por aquello de que conocimiento es poder) tal vez por la sabiduría que podían obtener los humanos si comían de ese fruto y la consecuente discordia, aunque también significa el renacimiento y la paz.

Otro contexto interesante se remonta a los años 1700, cuando las familias pobres de agricultores de Dinamarca y Suecia no tenían dinero para pagar la educación de sus hijos y, por eso, entregaban cestas llenas de manzanas a los maestros como forma de resarcirlos.

Pero como esa fruta se descomponía con rapidez, se optó por entregar sólo una. La práctica se extendió a los Estados Unidos y se afianzó en la década de 1920 con la crisis económica, pues para ayudar a los maestros se les entregaba manzanas aunque durante mucho tiempo se sigue relacionando que los ayudados son los alumnos ya que pretenden sobornar a los maestros con la dichosa manzana y asì obtener mejores notas.

De cualquier manera sigue siendo muy representativa del regalo ideal para los maestros, así que para todos ellas y ellos vaya nuestra mayor felicitación y sobre todo el reconocimiento para los mentores que no solo transmiten el saber de los libros, sino el significado de la vida.

Actriz, Directora y Productora Teatral

@LIrredenta

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