Por Eugenia Barajas
Con la promesa de pago de sus salarios y prestaciones y no así de indemnización, el diputado electo del PRI y próximo coordinador, Miguel Castro Reynoso desactivó y logró levantar el plantón, que mantenían trabajadores supernumerarios del Congreso de Jalisco y se garantiza la ceremonia de Toma de Protesta de los nuevos legisladores.
En un gesto de empatía, el coordinador ayudó a los empleados a «limpiar» el patio central de Palacio Legislativo donde se instalaron casas de campaña, catres, mesas con alimentos, garrafones de agua, una televisión y las bancas de madera del propio recinto.
Luego de platicar en privado con una comisión de los supernumerarios, Castro Reynoso fue muy tajante en dejar claro que se comprometía a pagar los salarios atrasados, pero no así la clausula del finiquito por tres meses y subrayar que no los estaban despidiendo, sino que concluían su contrato laboral.
Ante el reclamo de los supernumerarios sobre del juicio de nulidad que interpuso ante el Tribunal Administrativo, les aclaró que no era una estrategia en contra de los trabajadores, sino de la ilegalidad que representa esa clausula en algunos de los contratos, pero asumió el compromiso de no cobrar su salario una vez iniciada la legislatura hasta que no se les pagara el adeudo que ascenderá a dos meses.
Para solventar el faltante que esta LIX Legislatura ya no enfrentó, al declararse en números rojos, Castro Reynoso indicó que la solución esta en el Ejecutivo, al que tendrán que pedir adelanto de sus ministraciones o ampliación de alguna partida presupuestal para solucionar las deudas en el Congreso.
EL PLANTÓN EN IMAGENES
