Asamblea Nacional

SALINAS1APUNTES/Jorge Salinas

Carlos Castillo Peraza nos contaba sobre lo perverso que implica jugar con la palabra democracia y sustentaba su reflexión en una serie de ejemplos al confundir votos con democracia y lo peligroso de dejar sólo en una votación cualquier ocurrencia para tomar una decisión.

 

Carlos se preguntaba qué sucedería si sometías a consulta de los niños de primaria el recibir o no clases de matemáticas, sin realizar el ejercicio es evidente que los alumnos se inclinarían por el NO a esa materia.

Lo sucedido en la Asamblea Nacional del PAN es una muestra que los problemas del partido van más allá de los propios estatutos.

Resulta anecdótico que algunos de los reclamos que se han escuchado por diversos actores de Acción Nacional es la falta de confianza en el padrón de militantes, el control que existe en algunos estados, municipios por la manipulación de asambleas, convenciones y se caiga en el juego perverso de Javier Corral de elegir dirigente nacional por voto universal.

Quizá hoy tengan mas que nunca vigencia las palabras de Manuel Gómez Morin en la Asamblea Constituyente del 14 de Septiembre de 1939 cuando afirmaba que en una “Asamblea” nadie iba a triunfar ni a obtener; que sólo un objetivo habría de guiar y era el de acertar en la definición de lo que sería mejor para México.

Por encima de los estatutos el PAN tiene el reto de presentarse como un partido de Oposición serio, reformista con proyección de crecimiento, con una propuesta vanguardista de Gobierno y no un partido que se desvanece por luchas intestinas.

Germán Martínez escribía y con razón que el método “perredista” aprobado por la Asamblea Nacional para elegir dirigente nacional nunca le hubiera permitido a Carlos Castillo Peraza llegar como Presidente Nacional.

Ciertas las palabras de Germán, bastaría recordar que Carlos no era el favorito ni de las dirigencias, ni de los Gobernadores de aquélla época, es decir “las maquinarias” no apostaban al que fue el ideólogo de la transición mexicana, al líder del PAN que lo llevó a la victoria cultural.

Carlos sabía lo peligroso que era para el país un partido que caía en el chantaje o el falso apapacho, por ello apostó a un partido con alma, no con maquinaria.

@JorgeSalinasO

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