El Presidente de México, Enrique Peña Nieto y su esposa, Angélica Rivera arribaron a Roma a las 12:30 horas (5:30 de la mañana tiempo de la ciudad de México), para participar en las ceremonias de inicio del pontificado del Papa Francisco.
El mandatario mexicano llegó al aeropuerto Giovanni Basttista Pastine en Roma donde el embajador Alfredo Pérez Bravo, jefe de protocolo de la cancillería mexicana y el jefe de protocolo de la Santa Sede, monseñor José Antonio Bettencourt, subieron al avión presidencial de México para dar la bienvenida.
En la base aérea romana estuvieron para recibir al presidente de México, Carlos de Icaza, subsecretario de Relaciones Exteriores; Federico Ling Altamirano, embajador de nuestro país en la Santa Sede; Miguel Ruiz Cabañas, embajador ante la República de Italia, entre otros funcionarios de ambos Estados.
Posteriormente, Peña Nieto y su esposa Angélica Rivera se trasladaron a su hotel en Roma donde pernoctarán para participar el martes en la ceremonia para jefes de estado y gobierno, dirigentes de organizaciones internacionales, representantes de reinos y principados, que ofrecerá el Papa Francisco y con lo que se da inicio al nuevo papado, luego de que Benedicto XVI renunció al cargo.
Al Ejecutivo federal lo acompañan los secretarios de Hacienda, Luis Videgaray; de Relaciones Exteriores, José Antonio Meade, así como la subsecretaria de Población, Migración y Asuntos Religiosos de la Secretaría de Gobernación, Mercedes del Carmen Guillén Vicente, y el director general de Comunicación Social de la Presidencia, David López.
El Presidente Enrique Peña Nieto confirmó que invitará al Papa Francisco a visitar México cuando lo considere conveniente.
Entrevistado a bordo del avión TP-01 en su vuelo a Roma, el mandatario recordó que el pueblo mexicano es predominantemente católico y “seguramente a los mexicanos les daría mucho gusto ver y tener muy de cerca al Papa”.
