Nadie es perfecto

EL LIBRO DE LA SEMANA

Nadie es perfecto/Francisco Gavilán

Muchos defectos no deben ser necesariamente erradicados. Al igual que las monedas, los defectos poseen dos lados: el anverso —aquello que se considera negativo, detestable y odioso— y el reverso —que contiene aspectos positivos para la personalidad, haciendo a las personas más creativas y sacando lo mejor de sí mismas… Pero ¿de qué hablamos cuando hablamos de defectos?

En este libro descubrirás originales respuestas a preguntas como:

¿Puede el cotilleo ser más saludable que permanecer callado?
¿Puede la infidelidad unir más a la pareja?
¿Puede la envidia servir para algo más que para comerte la cabeza?
¿Puede la lentitud ser más eficaz que la rapidez?
¿Puede el pesimismo ser más útil que el optimismo?
¿Puede la hipocresía ser más necesaria que la sinceridad?
¿Puede el egoísmo transformarse en una virtud?

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