A 30 años de ATEI

PUNTO CRÍTICO Gabriel Torres Espinoza

Hace 30 años nace la Asociación de las Televisiones Educativas y Culturales Iberoamericanas (ATEI), para plasmar, entre sus fines constitutivos y fundacionales, el propósito de “contribuir al desarrollo de la educación, la ciencia y la cultura en Iberoamericana, mediante la utilización de la televisión y otras tecnologías de la información y comunicación”.

De modo que es una Asociación constituida formalmente en 1992, en Badahoz, España, en razón de la iniciativa ‘Comunicación para la Cooperación’, presentada ante la UNESCO en 1991, y ratificada, ese mismo año, en París, Francia, por los gobiernos de los países de la región hispanoparlante.

A tres décadas de su creación, bien puede decirse que ATEI constituye el esfuerzo de cooperación para la co-producción y co-difusión —innovadora y creativa— de contenidos audiovisuales educativos, científicos y culturales, con la intención de apuntalar la identidad y desarrollo regional de una aquilatada hispanidad.

De forma que ATEI es un fiel testimonio de la muestra de amistad, diálogo y colaboración que entrelazan a los pueblos hermanos de la región, que no sólo comparten una historia e identidad común, sino una inquebrantable solidaridad sustentada en una alianza estratégica, que persigue el encomiable derrotero de auspiciar el fortalecimiento, promoción y divulgación audiovisual de nuestra muy plural, enriquecida y ensanchada cultura, así como del más fecundo y vanguardista conocimiento científico.

Con relación a lo anterior, es importante destacar que ATEI, en sus últimos años, ha decidido relanzar, de manera pujante y dinámica, una de sus funciones sustantivas: la de afianzar el poco conocido, y muchas veces olvidado, derecho humano a la ciencia, reconocido, desde 1948, en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, misma que, en su artículo 27, numeral 1, lo establece de la siguiente manera: “toda persona tiene derecho a tomar parte libremente en la vida cultural de la comunidad, a gozar de las artes y a participar en el progreso científico y en los beneficios que de él resulten.”

Posteriormente, la Carta de la Organización de los Estados Americanos (OEA), suscrita en Bogotá, Colombia, el 30 de abril de 1948, en su artículo 38 dispuso que sus “Estados miembros difundirán entre sí los beneficios de la ciencia y de la tecnología, promoviendo (…) el intercambio y el aprovechamiento de los conocimientos científicos y técnicos.”

Y lo anterior, se ha hecho a través de la puesta en marcha —bajo el auspicio de ATEI— del Noticiero Científico y Cultural Iberoamericano (NCC), próximo a cumplir, este 09 de agosto, su Quinto Aniversario.

Este noticiero, se ha transmitido 238 semanas ininterrumpidas, a través de 135 medios públicos de la región, originarios de 19 países, para así transmitir más de 420 programas y poco más de 3,700 piezas informativas, a través de una robusta y sinérgica red de colaboración que aglutina a más de un centenar de medios públicos iberoamericanos así como a las agencias internacionales de información más prestigiosas a nivel global, como EFE, Deutsche Welle, AFP, Xinhua, Euronews, y las agencias de noticias de la NASA y la ONU.

Hoy ATEI cumple 30 años de ser el espacio para cooperar entre las televisiones públicas iberoamericanas. Es una asociación viva, solvente y socialmente relevante. Un símbolo de la cooperación y del esfuerzo colectivo de las televisiones de servicio público.