La pandemia: ineficacia o descuido

HACIENDO ADOBES/ Miguel Zárate

Y de repente parece que el gobierno le ha perdido el interés que ciertamente mostró en un principio para enfrentar la crisis de salud. Sin darnos del todo cuenta, Jalisco ha ido ascendiendo en la escala de personas afectadas por el virus (alrededor de 70 mil hasta ahora, que es cerca del 10 por ciento de todo el país), así como en el número de defunciones que, por tal motivo, supera ya las tres mil.

De suyo, prácticamente no queda municipio libre del problema y, en cambio, zonas específicas de Guadalajara y Zapopan, principalmente, se ven severamente afectadas.

Desde luego que el oriente de la ciudad capital del estado es el más dañado, comprendiendo colonias populares como Oblatos, Bethel, Hermosa Provincia, San Jacinto, etcétera y otro tanto acontece en Zapopan con la Constitución o su zona centro.

Empero, sería un error concluir que son los menos favorecidos quienes enferman más; pues no, resulta que también se ha extendido la epidemia en forma muy seria en Chapalita, Ciudad del Sol o en Puerta de Hierro.

Así que nadie, pero nadie en verdad, puede todavía considerarse a salvo. Los datos lo muestran y, entonces, surge más fuerte la interrogante: ¿y que están haciendo las autoridades que tanto énfasis pusieron al principio de la pandemia y que, ahora, aparentemente relajan las medidas y dejan de aplicar las necesarias reglas que ellas mismas impusieron?

Es evidente que hay factores que van desde un desbordamiento social poco responsable ante una situación que para nada puede todavía considerarse resuelta y, por otro, el descuido en la vigilancia, la supervisión, la aplicación de las sanciones que sean requeridas y, por qué no decirlo, en algunos casos afloran intereses y posibles corruptelas ya que no hay forma de explicarse cómo operan y siguen operando, por ejemplo, antros y bares hasta la madrugada, repletos y sin medida sanitaria alguna.

No hay duda de que hay cosas que no se están haciendo bien, mientras que la amenaza persiste y que, -lamentable es recordarlo-, en alguna ocasión el mismísimo López Gatell había afirmado que sería en octubre cuando Jalisco tuviera su peor etapa en el problema.

Bajo estas circunstancias, ¿de veras se ve posible que la entidad pase a semáforo amarillo, lo que acentuaría más el relajamiento? ¿en realidad se habla en serio en torno al regreso a las aulas? ¿será racional seguir abriendo giros que de alguna manera implican riesgos innecesarios?

También hay que poner en relieve un tema que involucra a grandes sectores de la población: el transporte público. Vamos, ni siquiera en el caso de la flamante línea 3 se han aplicado todos los protocolos debidos y ni qué decir de los autobuses que, como si nada estuviera pasando, se siguen viendo atestados, con pasajeros sin cubrebocas, convirtiéndose en obligado hacinamiento en el que, obviamente, la sana distancia famosa ni existe.

Ni Siteur, ni la Secretaría de Transporte y todavía menos la que ya parece vencida e inoperante Secretaría de Salud, están cumpliendo con lo establecido. Y vaya que esto de por sí es más que preocupante.

Otro dato revelador es el de que Jalisco acaba de alcanzar su propio récord de casos activos, prácticamente 4 mil, que son personas que deambulan por todas partes y que se convierten en los agentes de contagio que circulan casi siempre sin control alguno.

Así las cosas, valdría la pena que el gobierno de la entidad y los gobiernos municipales, retomaran sus correspondientes responsabilidades y que no nos hagan pensar que, efectivamente, pesaba más sobre todos ellos el interés político que el de la conducción consciente de millones de jaliscienses ante la gran crisis sanitaria de nuestro siglo.

Regidor del PAN en el Ayuntamiento de Guadalajara

@MiguelZarateH

2 comentarios

    • Luly Arceo Aguilera el 10/01/2020 a las 10:57 PM
    • Responder

    PEEGUNTAS QUE MUCHOS NOS HACEMOS.. NO HAY CONTINUIDAD NI CONGRUENCIA.. SALUDOS MIGUEL.

  1. La pandemia dejo de ser noticia para la política, hoy ya están enfocados en otros asuntos que dejan más en temas de política.

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