CAVILANDO ANDO/Alfonso García Sevilla
La comunicación ha sido uno de los aspectos que más le ha fallado al actual gobierno federal y que le ha acarreado miles de criticas por el manejo de los contenidos y su falta de timming.
De esta forma, desde las ruedas de prensa de Peña hasta los subsecuentes bombardeos de spots en los medios de comunicación han exhibido una
presidencia alejada de la gente y con explicaciones que a nadie satisfacen.
La más reciente e inverosímil es la de el aumento en la gasolina.
Este aumento de los combustibles y sus consiguientes manifestaciones multitudinarias de la gente en diversos estados de la república han acaparado los titulares y hemos dejado de lado un tema que realmente es preocupante y que está lejos de solucionarse en México: la escalada de inseguridad y la falta de acciones
contundentes del Estado para frenarla.
En sus recientes spots el gobierno federal minimiza estos hechos al señalar que «Cada vez hay más conflictos que ponen al mundo de cabeza, pero en México a los problemas les ponemos buena cara, así nada nos detiene» dice una voz mientras abre el anuncio con un imagen bélica.
Más adelante señala «Los mexicanos hacemos todo más llevadero y luchamos por
ser mejores, porque lo que nos hace grandes es estar unidos, venga lo que venga y
pase lo que pase, por eso hoy más que nunca, la unión es lo que cuenta».
La imagen con la que inicia este spot refiere a conflictos armados, a guerras.
Indigna que aun quieran vendernos que la situación e nuestro país no es como en otros
lugares del planeta, cuando cada año existen aumentos exponenciales en las cifras
de homicidios dolosos y la violencia se generaliza al grado de cometerse
impunemente asesinatos en lugares públicos y turísticos a plena luz del día.
2016 el año más violento del sexenio actual dejó una estela de 20 mil que acumulados
desde el inicio de su gestión ronda los 70 mil ante la incapacidad y la ausencia de
estrategias que permitan hacerle frente ante una delincuencia mejor armada y
organizada que ha evidenciado a un Estado desarticulado e inerme, sin capacidad de
reacción y tratando mediante spots infames, decirnos que todo está bien.
¿Usted se siente seguro en este país? Yo no.
