ICONIA, siempre sí

cesar ruvalcaba

RESTAURACIÓN/César Ruvalcaba Gómez

Imagine usted: un desarrollo inmobiliario sustentable cerca de la barranca de Huentitán, más espacios públicos para los vecinos, museos, centros tecnológicos, hospitales y la mejora del equipamiento urbano de una de las zonas más deprimidas de Guadalajara.

Se escucha bien ¿no?, pues así se las vendieron y así se las compró en 2008 el Ayuntamiento de Guadalajara a una empresa española que les vendió espejitos. Debían terminar el proyecto en 2 años. Van 8 y no han puesto ni un ladrillo.

Publicado el 10 de julio de 2008, en la Gaceta con el decreto D54/17/08, se aprobó la edificación de Puerta Guadalajara, proyecto en el que el Ayuntamiento aportaría 136 mil 495 metros cuadrados de un predio a una empresa privada a cambio de obras públicas previamente definidas por 65 millones 534 mil dólares.

De entrada había una trampa. Las obras en contraprestación correrían a cargo de la constructora española con lo que podrían amortizar precios. Además la entrega de permisos de construcción sería sin costo a la empresa con los cual -se estima- se ahorrarían más de 400 millones de pesos por ese concepto.

La empresa española no tenía dinero, no hizo nada más que un gran negocio engañabobos de saliva.

La empresa vendió (sin autorización del Ayuntamiento) los derechos del proyecto a grupo Mecano (este al parecer más solvente y nacional) y estos últimos desde 2010 buscaron al entonces alcalde Aristóteles Sandoval y luego a Ramiro Hernández para continuar el proyecto.

¿Porque en ninguna de las dos administraciones pasadas logró Mecano iniciar el proyecto? ¿Porque no abrazó el Ayuntamiento la nueva iniciativa?

Sencillo; porque querían meter gol otra vez. Ni Aristóteles ni Ramiro estuvieron dispuestos a aceptar condiciones desfavorables para los Tapatíos y que se traducían en la pérdida de espacios públicos que son de todos.

Primero, proponían realizar ellos las obras por los 65 millones de dólares pero VALUADOS A 10.50 PESOS POR DÓLAR, lo que costaban hace 8 años. Solo con esta trampa se pierde para los Tapatíos 465 millones de pesos.

Hace unos días escuchamos que el  alcalde Alfaro (cuando regrese de sus vacaciones en la Eurocopa) si quiere hacer el proyecto así como se la pongan, sin más que una actitud entreguista.

Siempre que uno abra la boca hay que saber lo que se dice, no vaya a ser que después esas palabras tengan que ser digeridas de manera propia.

Cuando tuve oportunidad de servir a Guadalajara como Regidor en la pasada administración municipal recibimos múltiples señalamientos infundados de actores políticos que criticaban el proyecto de ICONIA y se manifestaban por recuperar el premio en cuestión bajo el argumento que era un negocio que se quería realizar. ¿Adivinan quienes decían esto?

Exacto, Los mismos del Partido Movimiento Ciudadano que hoy se felicitan por el gran proyecto que van a hacer.

Políticos de muy poca ética, pragmáticos en las mentiras, camaleones que desprestigian la política de verdad. Eso es lo que Alfaro y su doble discurso representan en una sociedad en crisis de identidad.

Ya lo hicieron con el proyecto de Luminarias y ahora con ICONIA; la misma fórmula de criticar si el otro lo hace y luego hacerlo ellos mismo y anunciar su logro.

Más temprano que tarde caerán los que no dejan de morderse la lengua y sin reconocerlo, claro está, ahora reculan lo que tanto vociferaron a ritmo de ladridos.

Secretario Organización PRI Guadalajara

@Cesar_Ruvalcaba

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