De acuerdo con estimaciones de la American Chamber of Commerce of Mexico (AmCham) y el Centro de Investigación para el Desarrollo (CIDAC) el año pasado los mexicanos gastaron más de 43 mil millones de pesos en productos pirata.
El estudio Piratería, públicado por sin embargo, señala que entendiendo el mercado sombra en México indica que el valor de las compras de productos ilegales realizada por ocho de cada diez mexicanos el año pasado sobrepasa el presupuesto anual de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), mismo que asciende a 37 mil 755 millones de pesos, y dobla el del Instituto Nacional Electoral (INE), que es de 18 mil 572 millones.
Verónica Baz, directora general del CIDAC, destacó que la adquisición de productos pirata provocó que el fisco dejara de percibir más de seis mil millones de pesos sólo por Impuesto al Valor Agregado (IVA) en 2014. “Si se contabilizan los demás impuestos, las pérdidas para las arcas públicas son millonarias”. Sin embargo, la investigación demuestra que, aunque la población es consciente de los efectos negativos que genera el consumo de estos productos para el país, existe una aceptación social generalizada hacia la misma.
Encontramos que la piratería es concebida como ilegal, pero no grave, incluso la mayoría de las personas considera que decir mentiras o robar un pan o un dulce es peor”, apuntó Kiyoshi Tsuru, presidente del Comité de Derechos de Propiedad Intelectual de la AmCham.A decir del experto, la mayoría de los consumidores no vincula el consumo de la piratería con afectaciones a su bienestar individual, ni a consecuencias legales por parte de las autoridades, lo que en su opinión está relacionado con los altos índices de impunidad y un Estado de derecho permisivo.
