CAVILANDO ANDO/Alfonso García Sevilla
“Nadie pone a sus hijos en un bote, a menos que el agua sea más segura que la tierra”
Warson Shire
Hay imágenes que indignan y que nos hacen reflexionar si como humanidad estamos en el camino correcto. La fotografía del el pequeño niño sirio Aylan Kurdi, encontrado muerto en la playa turca de Ali Hoca Burnu captada por el lente de la fotorreportera Nilüfer Demir, se ha vuelto viral en redes sociales y en los medios de comunicación mundiales y nos ha movido las fibras más sensibles del ser, desde la tristeza hasta la impotencia pasando por el enojo y la frustración.
No podemos entender que a 4 años nadie haga nada por detener una cruenta guerra civil en Siria y evitar el éxodo de gente buena que lo único que quiere son derechos e igualdad necesarios para una vida digna y en paz.
Hasta la tragedia de Aylan el mundo volteó a Siria.
Así como lamento lo de Aylan, -más porque un par de días previos descubrí a mi pequeño sobrino Dante, de 6 años, dormido en una postura muy similar a la del niño turco-, lamento que en México no hemos sido sensibles a la lacerante y cruel realidad que viven nuestros niños, por el contrario, seguimos pasándola de largo.
Recuerdo hace algunos años la muerte a manos del novio de su madre y con el cómplice silencio de ella, del pequeño “Jorgito” a quien enterraron el patio trasero de su vivienda y que consternó a los tapatíos, sin que a la fecha se hubiera hecho algo para evitar más decesos por maltrato infantil, las cifras son escalofriantes, tan solo en 2014, según datos de la Procuraduría de la Defensa de la Infancia y la Familia, del DIF Jalisco recibió reportes de maltrato hacia 1,204 niños y adolescentes menores de 17 años, de los cuales murieron 18 por dicha causa.
En lo que va del 2015 se reporta un número muy similar, por lo que lejos de atención para erradicarlo se enquista como un mal que corroe nuestra sociedad, sin que se esté haciendo algo al respecto.
Y no solo en Jalisco, a nivel internacional México ocupa el vergonzoso primer lugar en violencia física, abuso sexual y homicidios de menores de 14 años entre los 33 países de la OCDE. ¿Es necesario decir más?
¿Hasta cuándo?
¿Es que será necesario que hagamos virales las fotos de los niños asesinados por sus padres para voltear a verlos?
Como sociedad estamos reprobados y del gobierno…sumarle a la larga cadena de fracasos y omisiones en temas de vital importancia para el desarrollo de un estado sano.
Un país que no cuida a sus niños es un país que condena su futuro y tristemente cada día, el futuro lo vivimos más de cerca. Y nos preguntamos por qué las cosas están mal…
Analista político
@aagsevilla
Facebook Alfonso García Sevilla
