En el marco de la firma del decreto que reforma la Ley General de Contabilidad Gubernamental, el Presidente de México, Felipe Calderón señaló que no se puede permitir que malos funcionarios se enriquezcan desde sus puestos públicos y manchen la imagen de toda la gestión pública, por lo que felicitó al Congreso de la Unión por la aprobación de las reformas e hizo votos porque de ambas Cámaras sigan emergiendo decisiones ‘eficaces y constructivas para el bien de México’.
Entre los beneficios de la ley destacó que ayudará a poner la lupa ciudadana sobre cuánto y cómo gastan los tres ordenes de gobierno los recursos, las reformas dijo, permitirán transparentar el gasto público y toda la información financiera debe presentarse de manera clara sencilla y accesible.
Además, se dispone que los gobiernos difundan vía Internet datos relativos a la evaluación de desempeño de los programas y políticas públicas antes de presentar al poder Legislativo y también se incrementan las sanciones administrativas a quienes incumplan con lo dispuesto en la ley que llevarán hasta la destitución o inhabilitación.
Se dijo convencido de que el gobierno es un instrumento al servicio del bien común, por lo que todo gobernante y servidor público tiene la obligación legal, política y ética de actuar con honradez y transparencia siempre de cara a la ciudadanía.
