Por Eugenia Barajas
Que si fue cierto, que sí le mentó la madre al alcalde interino de Tlajomulco, Alberto Uribe, pero que fue porque se burló de haberlo dejado sin chamba, aceptó el ex coordinador administrativo, Quirino Velázquez Buenrostro.
Entrevistado en la cabina de La Méndiga Política, el ya ex funcionario y parte del grupo padillista opositor al grupo de Enrique Alfaro, Alianza Ciudadana, reconoció la mentada de madre, y nos relató los hechos.
«El viernes como a las 7 de la tarde teníamos una conversación telefónica, Uribe se estaba burlando y no se cansó de ofender, de mofarse, diciendo, ‘te lo dije, que te íbamos a correr a tu gente y te lo estoy cumpliendo, con nosotros no juegas’, y lo que le dije fue que, ‘qué poca mamá tenías tu y Enrique’, así pasaron las cosas me cuelga el teléfono y al rato me manda un mensaje, que Enrique Alfaro ya sabe tu mensaje y yo le respondo que tu y Enrique vayan y chin…..fue todo lo que dije y de eso ha hecho un escándalo el señor».
«Ahora dice con mentiras, con infundios que lo amenacé de muerte, ahora resulta que los autoritarios tienen miedo de un simple ciudadano qué porque les ando causando revueltas», añadió.
Lo justificó Quirino al señalar que todo era por la intolerancia de Enrique Alfaro y sus ideas políticas.
Velázquez le recriminó a Alfaro que se han confrontado, porque éste no quiere compañeros, quiere ciervos, porque nadie puede opinar, ni hablar, y sostuvo que Alberto Uribe «no es capaz de pensar por sí mismo, hace exactamente lo que Enrique le ordena, lo mismo Ismael del Toro y cuando nosotros veíamos esa actitud dictatorial empezamos con ciertas diferencias con él, pero la gota que derramó el vaso fue la fecha en que se rompe la alianza de las izquierdas cuando nos quiso obligar a renunciar al partido o nos corría».
Adelantó que falta poco tiempo para que salga a la luz «el cochinero» que dejó Alfaro en el Ayuntamiento por desvío de recursos, que no es investigador pero confió en que se conocerán las irregularidades y para ello presentarán denuncias.
Descartó que la denuncia penal procederá porque es una «vacilada».
Mientras se daba la entrevista terminaba el zafarrancho en las oficinas de los ex funcionarios que pretendieron ingresar a la fuerza y se confrontaron con la policía municipal, por lo que ahora los detenidos los tienen como presos políticos y les servirá de bandera a los perredistas para continuar en el desgaste entre los dos grupos.