PUNTO CRÍTICO
Gabriel Torres Espinoza
Durante la glosa del 4to informe, el director de Ipejal sostuvo que “el Instituto de Pensiones está mejor que hace cuatro años”, y que el “portafolio de inversiones es de 20 mil millones de pesos” ¿Se puede sostener que, durante estos cuatro años, está mejor el Ipejal? Veamos.
El déficit actuarial del Ipejal, ¡asciende a 260 mil millones de pesos!, cuando hace cinco años, el monto de este déficit era de apenas 57 mil millones de pesos. Mientras que la ‘reserva técnica’ del Ipejal registraba un crecimiento anual promedio de 10%, de 2007 a 2014; para el periodo comprendido, de 2015 a 2021, este crecimiento anual promedio se redujo al 5.9%.
El adeudo de aportaciones patronales por parte de diversos entes públicos al Ipejal, a mediados de este 2022, alcanza los 486 millones de pesos. Así que, el Ipejal, ¿está mejor?
El director de Ipejal insiste que no hay problemas con el abasto de medicinas; pero, el desabasto sistemático de medicamentos en la Unidades Médicas del Ipejal, ha dado lugar a 142 quejas recibidas en la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco, tan sólo del 01 de enero, al 30 de septiembre de 2022.
La Contraloría del Estado, 2016 a la fecha, ha presentado un total de 23 denuncias penales (el director de Ipejal ya dijo que eran ya 26) por malversaciones ocurridas en el Ipejal durante la pasada administración (sólo en la pasada, ¡nada contra los funcionarios de Emilio González Márquez, y nada contra los del actual gobierno!).
La suma de lo que motiva estas denuncias penales, presentadas por la Contraloría del Estado, de 2016 a la fecha, asciende a los poco más de cuatro mil millones de pesos. El director de Ipejal sólo reconoce (que ya es avance) 2 mil millones de pesos de daño patrimonial.
Aceptando sin conceder, que son únicamente ¡dos mil millones de pesos el daño patrimonial!, de un portafolio de inversión de 20 mil millones, es el 10%. Es decir, es mayor el daño patrimonial, que los rendimientos financieros que pudiese obtener esa cantidad de las inversiones ¡Más fraudes, que rendimientos financieros! Escandaloso. Entonces, el Ipejal ¿está mejor?
En Jalisco, por la vía de los hechos consumados, se ha creado un ‘Fobaproa’ local. Se privatiza el dinero a través de los fraudes, y se socializa la deuda de las inversiones fallidas, como déficit del Ipejal (la deuda es ahora de los trabajadores).
Esto ocurre, porque el Instituto de Pensiones, desde la reforma de 2009 -que eliminó los controles que el Poder Legislativo sostenía sobre las inversiones que ahí se realizan-, dio lugar a que se destinara, de forma discrecional y delictiva, los recursos del fondo de los trabajadores para todo tipo inversiones de alto riesgo, fallidas y plagadas de corrupción.
No ha sido posible que se ponga freno al despilfarro del dinero de las pensiones en inversiones fallidas y/o de ‘alto riesgo’, de cara a los escándalos y los encarcelados, el comprobado uso discrecional del dinero de los trabajadores y la irresponsabilidad de un comité de inversiones que no rinde cuentas a nadie, de nada.
Siguen, así, impunes las estafas cometidas en fideicomisos fraudulentos, obra pública y proyectos inmobiliarios inseguros: Villas Panamericanas, Chalacatepec, Santa Cruz de Soledad, Ciudad Judicial Laboral, Abengoa, Amapas, Toscana/Santana Margarita, Alcalde, y Nordia Tlajomulco, y un larguísimo etcétera. Así las cosas, el Ipejal… ¿está mejor?