CAMBIO Y ACCIÓN
Claudia Murguía
Vivimos en una sociedad donde el temor se ha apoderado de la sociedad. En la actual administración federal la inseguridad a alcanzado cifras históricas y la corrupción sigue imperando en los sistemas de impartición de justicia. Entre los delitos más frecuentes está la trata la cual, impacta directamente a niñas, niños y mujeres convirtiéndolos en víctimas directas de este delito.
En el 2021 Hispanics in Philanthropy (HIP), organización civil que analiza la problemática que enfrenta América Latina y el Caribe, publicó un informe donde señala, con datos publicados por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), que la cantidad de víctimas de trata de personas en México va en aumento, una de las principales formas de tráfico es la explotación sexual de mujeres y niños y los menores entre cinco y doce años fueron víctimas de abuso sexual, pornografía, además fueron forzados a mendigar para otros.
Lamentable que nuestro país tenga una de las tasas más altas del mundo por trata de personas. La violencia hacia las mujeres y la trata ha aumentado considerablemente. El gobierno federal miente al decir que están erradicando la corrupción, ya que en el mismo informe se menciona que:
«…los funcionarios gubernamentales colaboran con los cabecillas de esos grupos, y han llegado a tomar parte directamente en la trata.
Además, funcionarios de inmigración corruptos han falsificado documentos para las redes criminales o han aceptado sobornos para facilitar el ingreso ilegal de víctimas al país, como consta en el informe de la CNDH.
El Departamento de Estado halló que el gobierno mexicano “no enjuició ni condenó a ningún funcionario por complicidad en delitos de trata en 2020″.
De acuerdo a un estudio hemos detectado que en Jalisco, los delitos de: prostitución ajena u otras formas de explotación sexual, la mendicidad forzosa, la utilización de personas menores de edad en actividades delictivas y la adopción ilegal; no están considerados como trata en el Código Penal del Estado, mientras que la Ley General sí los contempla, las penas otorgadas en Jalisco por este delito son menores en comparación con la Ley General.
Esto hace que nuestro estado se convierta en un ente para la explotación y trata de personas, pues las penas son laxas y no están armonizadas con la Ley General.
Mi compromiso es claro, trabajar por un desarrollo integral incluido el proteger a niñas, niños y mujeres, por eso presenté la iniciativa reforma al Código Penal Estatal sobre trata de personas, mencionando los elementos que constituyen este delito y que no están considerados como trata; una vez que se apruebe la reforma estos delitos serán juzgados de acuerdo a lo que señala la Ley General aplicándose las penas que señala la misma.
El ser humano tiene la capacidad de razonar y ser empático con los demás. ¿Se podrá llamar humano a quien utilizando la brutalidad, destruye familias, causa dolor, siembra el miedo y lo que es más grave, destruye lo más importante que tenemos como seres humanos: la libertad?
1 comentario
Pues creo que le falta asesoría jurídica a su opinión, así como objetividad, empero entiendo que la hace bajo su manto azul.