Danielle Shea, de 22 años, de Quincy, Massachusetts, realizó las amenazas luego de llegar a una ceremonia de graduación con toga y birrete junto con su madre, que no sabía que ella se había salido de la escuela. Ella «entró en pánico» cuando sus familiares se dieron cuenta que su nombre no estaba en la lista de graduados, según la policía.
Shea hizo dos llamadas a la policía avisando que había bombas en la biblioteca de la universidad, en un intento por que la ceremonia de graduación fuera cancelada. Sin embargo, la ceremonia se aplazó solo 90 minutos y se movió a 1.6 kilómetros de distancia, a un campus diferente de la universidad en el pueblo de Hamden.
La policía dijo que una mujer contactó al área de seguridad de la escuela en dos ocasiones primero diciendo que había «una bomba en la biblioteca» y 20 minutos después afirmando que había «varias bombas en el campus. Tienen que evitar la graduación. No es una buena idea».
No se encontraron explosivos en el campus, según la policía, que rastreó a quien llamó a través del número telefónico que quedó registrado. Shea fue acusada de amenaza en primer grado y reporte falso de un incidente. Fue detenida la policía y se le impuso una fianza de 20,000 dólares. Se espera que aparezca ante una corte en Meriden el 30 de mayo.