Por Eugenia Barajas
«No vamos en cero, de alguna manera nos conocemos», subrayó el Cardenal de Guadalajara y presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Francisco Robles Ortega a la pregunta de cómo entre los papables se determinará quién será el próximo Papa, «no tengo una lista, de modo de decir a estos los descarto, hay que ir completamente abiertos a lo que se vaya manifestando», dijo al termino de la misa dominical.
Hay alguien que se acerque a los Cardenales para pedir el voto a favor de uno u otro.
-Esta va a ser mi primera experiencia, no se decir si habrá eso.
Se ha acercado alguien con usted para pedirle su voto.
-Absolutamente no.
Cómo interpretar el mensaje o la señal del Espíritu Santo en ese momento de recogimiento y silencio dentro del Cónclave para saber cuál de los candidatos es realmente el elegido para suceder a San Pedro.
-Haciendo un análisis del momento que vive el mundo actual, de la misión de la Iglesia actualmente, de los perfiles, las personas que pudieran asumir ese encargo, es un discernimiento.
No vamos a esperar que el Espíritu Santo se aparezca y nos hable, no, por la mediación humana el Espíritu Santo se manifiesta, cuál es la situación del mundo actual, cuál es la misión de la Iglesia en este mundo, quién pudiera de los elegibles ejercer este servicio de ser principio de unidad y comunión en la Iglesia, allí están los Cardenales, nos conocemos y así se va forjando el criterio, la tenencia hacia la persona que es más probable.
Les pasan algunos expedientes para que conozcan la trayectoria de algunos de ellos.
-De alguna manera este conocimiento es permanente, llevo 5 años de Cardenal y en 4 o 5 veces acudí al Colegio Cardenalicio y en sus exposiciones uno conoce sus trabajos, nos vamos conociendo, dando cuenta de lo que hace cada Obispo.
Ha recibido alguna notificación de que se adelanta la elección.
-Personalmente no he recibido ningún aviso o convocatoria oficial, lo que se es que el Papa es Papa hasta el 28 de febrero.
Finalmente refirió que el Cónclave es la reunión de todos los Cardenales menores de 80 años, «se reúnen en silencio a orar y discernir que persona, que Papa debe de liderar la Iglesia próximamente».
La elección está concretada a asimilar esta noticia, porque es grande, a darle gracias a Dios por la persona de Benedicto XVI, para que lo siga bendiciendo y también pedirle al espíritu santo que ilumine no solo a mí, sino a los que tenemos esta responsabilidad de elegir al nuevo Papa
