PUNTO CRÍTICO/Gabriel Torres Espinoza
Con el afán de mermar a la pandemia que se extiende por nuestro país, se estableció una alianza entre 11 estados para que el uso del cubrebocas sea obligatorio para prevenir el Covid-19.
Aguascalientes, Colima, Nuevo León, Tamaulipas, Michoacán, Coahuila, Jalisco, Guanajuato, Chihuahua, San Luis Potosí y Durango, son las entidades que pactaron esta medida para evitar más contagios por coronavirus en México.
En Jalisco, la Universidad de Guadalajara y organizaciones empresariales, sindicatos, 131 organizaciones civiles y 500 líderes emprendieron una campaña que promueve el uso del cubre bocas: «Estamos junt@s y lo traemos bien puesto».
En el concierto internacional, son ya 44 los países que han determinado como obligatorio el uso del cubrebocas. Existen casos notables que implementaron esta medida sanitaria y sus índices de letalidad e incidencia de SARS-CoV-2 son menores a los que se registran ahora en México, Estados Unidos, Brasil o Reino Unido, naciones que no implementaron esta medida obligatoria.
Los casos más sobresalientes de los países que están utilizando el cubrebocas son Vietnam y Cuba, donde el país de Asia reporta solamente 382 casos acumulados y ningún deceso por COVID-19 y la isla del Mar Caribe tiene 2,445 casos y 87 muertos.
La misma Organización Mundial de la Salud reconoció la importancia del uso del cubrebocas, el pasado 05 de junio. Epidemiólogos del Instituto Mexicano del Seguro Social hicieron un llamado a la sociedad sobre la importancia del uso correcto de cubrebocas, el cual debe cubrir nariz y boca para evitar contagios. Precisó que un cubrebocas estándar es de uso común y ante la emergencia sanitaria por COVID-19 todas las personas lo pueden utilizar. “Éste lo que hace es proteger en un 70 por ciento que la persona enferma no transmita la enfermedad ni permita la salida de secreciones”.
Los datos derivados de investigaciones recientes sobre el Covid-19 advierten: 1) que la forma más eficaz de contagio resulta precisamente del contacto de la cara con esas ‘gotículas’; 2) que el 80% de los infectados son asintomáticos o presentan síntomas leves [el portador no acude a un hospital]; y 3) que un contagiado pre-sintomático tiene una capacidad eficaz de contagio.
Pero, ¿cómo puede saberse si una persona se encuentra contagiada? Por más amplio que sea el número de pruebas, nunca comprehenderán el ‘universo’ de contagiados en un país: más aún, porque un contagiado asintomático (que no sabe que tiene Covid-19) no recurrirá a una institución de salud a realizarse una prueba.
Asia, en particular China, Singapur, Taiwán, Corea, Japón, Hong Kong y Corea del Sur, sin recurrir a cuarentenas generalizadas, ni al confinamiento social, hoy acreditan una envidiable contención de la pandemia, en buena medida gracias al uso del cubrebocas entre la población civil.
El uso del cubre boca pretende asegurar fundamentalmente que quien se encuentre contagiado, no contagie a los demás. Es un asunto de elemental sentido común, y una buena medida de prevención.
Se puede recurrir a un buen cubre bocas, pero ante las limitaciones de algunos, debe advertirse que cualquiera que se use, es, en definitiva, mejor que ninguno.
