POLÍTICA SIN ÉTICA/Jonadab Martínez
El 1° de Julio la gente decidió renovar el Poder Ejecutivo en nuestro Estado, algunos pensamos que el excelente trabajo de Enrique Alfaro en la función pública lo llevó a ser el ahora Gobernador electo, otros creen que el hartazgo político orilló a la gente a votar contra el PRI y el PAN, sin embargo, sean las razones que sean, ganó el candidato de Movimiento Ciudadano.
Después de años de trabajo político-electoral, de coordinación con los distintos municipios y con las negociaciones partidistas, se intentó llevar un proceso cívico y civilizado, de propuestas y proyectos que le vienen bien a Jalisco. Aunque hubo señalamientos y denuncias presentadas, que a ciencia cierta no sabemos el desenlace de las mismas, ganó el mejor candidato, el que realmente se preparó para esta contienda, no fue nada improvisado ni circunstancial, ganó la justicia, ganó el equipo de trabajo que lleva años unido, fortalecido con nuevas expresiones, y que ahora está más fuerte que nunca.
Recuerdo el año 2012, Enrique Alfaro resurgiendo de la nada, sin un partido fuerte, sin estructura ni financiamiento, dio la batalla tan bien que estuvo a punto de ganar, pero ganó el voto duro, la ola tricolor a nivel nacional, las despensas y las tarjetas electrónicas, ganó el Nuevo PRI, que al tiempo demostró no ser mejor sino peor que el PRI añejo. Del año 2012 resultó la peor generación de gobernadores emanados del PRI.
Viene una gran oportunidad para Movimiento Ciudadano en Jalisco, su trabajo será reflejo a nivel nacional, su desempeño estará en el ojo del huracán, de hacerlo bien, es inevitable pensar en la continuidad y en escaños federales más altos. Es cuestión de tiempo, ¿porqué? Porque estoy seguro que la refundación de Jalisco dará nuevos bríos, un nuevo rostro a Jalisco y con ello, el liderazgo nacional.
Ahora a concentrarse, viene lo mejor para el Estado, hay razones en porque pensar que así será, Tlajomulco y Guadalajara han sido testigos del estupendo desempeño, de la manera diferente de gobernar, de la transparencia y de la austeridad.
Además del apoyo en las urnas, ahora se requiere del apoyo haciendo comunidad, de la contribución de todos, de ciudadanos que realmente quieran un Jalisco mejor y que cada uno asuma su compromiso con el Estado, solo juntos, sociedad y gobierno transformaremos Jalisco en un lugar mejor para nuestros hijos.
