Relativizar la corrupción

VerónicaJuárez

PERSPECTIVA21/Verónica Juárez Piña 

Lo hemos dicho en múltiples ocasiones, compartimos una parte del diagnóstico de Andrés Manuel López Obrador. Nosotras y nosotros, en por México al Frente, entendemos que la corrupción es un cáncer que debemos extirpar. Por ello, usted puede revisar el proyecto que presentamos e incluye las iniciativas más ambiciosas en materia de combate a los corruptos: fiscalía autónoma, muerte civil, no prescripción de delitos de corrupción, inteligencia financiera.

Conocemos, de primera mano, el compromiso de Ricardo Anaya de combatir la corrupción se vista de los colores que sea y provenga de donde provenga. Frente a la corrupción, no debe haber distingos partidistas.

Algo que no pasa en Morena. Ellos son implacables con el resto de las y los mexicanos. A quien no pensamos como ellos, nos llaman “la mafia del poder”. Dicen que somos corruptos y casi traidores a la patria. ¿Y ellos cómo defienden el interés general? Pues sencillo: el caso Layda Sansores los deja al desnudo. Layda Sansores, Senadora con licencia del Partido del Trabajo, cargó al Senado de la República 700 mil pesos por concepto de gastos personales para muñecas, tintes de cabello y electrodomésticos.

Así se dio a conocer en una investigación realizada por Fátima Monterrosa y presentada en el noticiero En Punto. En ella se señala que la candidata a la alcaldía de Álvaro Obregón por la coalición Juntos Haremos Historia, cargó al Senado dicha cantidad entre 2016 y 2017.

La respuesta de López Obrador fue defender a una candidata que había hecho algo incorrecto y había traicionado a las y los ciudadanos desviando dinero para lujos personales. Dijo que era “guerra sucia”. Otra vez las evasivas de López Obrador. Se indigna por la corrupción en otros partidos, pero no tiene la decencia para condenar lo que sucede en su instituto político.

¿Era tan difícil condenar sin matices el uso discrecional de los recursos públicos? ¿No pudo haber señalado que era incorrecto que se utilizara para tintes o electrodomésticos una partida que está destinada para el trabajo parlamentario?

López Obrador siempre tiene dos criterios para medir. Si estás con él, todos tus pecados se limpian. Y si no pregúntenle a Alfonso Romo, Germán Martínez o Manuel Espino. Antes destacados integrantes de la mafia del poder y hoy cercanísimos colaboradores del candidato.

O qué decimos de Elba Esther Gordillo, definida como sátrapa en decena de ocasiones por López Obrador, y hoy parte de su coalición que quiere secuestrar la educación en México. No es confiable, en materia de corrupción: defenderá a los suyos.

México necesita un bloque sin fisuras de la clase política frente a la corrupción. No es un asunto de siglas partidistas, sino de recuperar las instituciones y ponerlas al servicio del interés de todos las mexicanas y mexicanos. No queremos un Presidente, como ocurrió con Peña Nieto, que relativice la corrupción o que crea que es un asunto cultural. México requiere a un mandatario dispuesto a ir a fondo, sin amnistías y capaz de poner en marcha las instituciones que el país necesita para abatir los niveles de corrupción que nos lastiman.

No podemos relativizar la corrupción, algo que López Obrador ha hecho con los suyos

Consejera nacional del PRD

@juarezvero

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