Después de una vida de describir la cosmogonía católica, Dante Alighieri pudo haber inventado el Purgatorio en la Comedia.
Dante Alighieri es, sin lugar a dudas, una de las figuras fundamentales de la poesía medieval. En su obra más importante, la Comedia, describe con detalle el viaje que hace a través del Infierno, del Purgatorio y del Paraíso. Se ha considerado, incluso, como la obra que marca la transición del pensamiento medieval al renacentista.
¿Quién fue Dante Alighieri?
Nacido en Florencia en 1265, Dante Alighieri fue hijo de una familia de abolengo. En su autobiografía en verso, Vita Nuova, relata que el primer encuentro con su musa fue a los 8 años. Beatriz, quien se convertiría en la motivación de su obra más importante, fue su amor platónico desde aquel momento.
Nunca lograron concretar su relación, ya que ella murió algunos años después. En lugar de eso, Dante continuó con su vida como erudito cercano a los círculos eclesiásticos de poder. A lo largo de su vida, ocupó puestos como embajador y enviado por La Paz por parte del Papa Bonifacio VIII.
Sin embargo, un altercado político en el que se le acusó de malversación de fondos habría de destinarlo al exilio permanente de Florencia. Fue entonces que realmente se pudo dedicar a las letras.
¿Qué escribió?
Escrita alrededor del siglo XIV en Italia, la Comedia es un compendio que intenta esquematizar la estructura de la cosmogonía católica. Tras ser exiliado de su natal Florencia, Dante dedicó su vida a representar el sistema de creencias de la fe romana.
En un total de 14 mil versos, el autor se convierte a sí mismo en el personaje principal de su obra magna. De la mano de Virgilio, autor de la Eneida, emprende un recorrido por su primer destino: el Infierno. En éste, hace un acomodo de la gravedad de los pecados capitales, de acuerdo al sistema de valores de la moral cristiana.
La obra está llena de simbolismos referentes a la Trinidad, entre diversas alegorías a pasajes bíblicos. Es por esto que se ha ganado un espacio en la literatura universal como una de las epopeyas más importantes de Occidente. Como tal, diversos artistas de la época y posteriores la utilizaron como inspiración para representar los diferentes espacios en los que se fundamenta el catolicismo.
El Purgatorio: ¿invención de Dante?
Después de pasar por cada círculo del Infierno —que representa la gravedad de los pecados en orden descendente—, Dante se despide de Virgilio para pasar a un espacio diferente, al que el poeta romano no tenía acceso. Éste es el Purgatorio.
Desde la visión del autor, este espacio hace las veces de una especie de antesala al Infierno. En él, las almas que han trascendido la vida terrenal expían las manchas de los pecados que no pudieron confesar antes de morir. Dicho de otra manera, es el lugar en donde sucede una última purificación antes de poder entrar al Paraíso.
En lugar de dividirlo en círculos, Alighieri decidió partir el Purgatorio en terrazas. Sin embargo, no existe un registro anterior en la Historia en la que se hable de un lugar en el que las almas expíen sus pecados. En la Biblia, por ejemplo, Jesús nunca habló de una antesala al Infierno.
Es por esto que diversos teóricos religiosos, historiadores del arte y antropólogos han convenido en atribuir esta invención al poeta florentino. En 2011, incluso, el Papa Benedicto XVI aseguró que “el purgatorio no es un lugar del espacio, del universo, sino un fuego interior, que purifica el alma del pecado.”
Con información de Muy Interesante
