ME LLEVA…LA CULTURA
La Irredenta…Irredenta
¡Hola mis queridos mortales!
Hoy quiero compartirles mis tristezas porque como dijera el Buki: “¿a dónde vamos a parar?” hay muchas situaciones lamentables relacionadas con la cultura que quiero compartirles pero hoy en especial y por lo reciente de la fecha platiquemos de la lectura.
Como algunos sabrán el pasado 23 de abril se conmemoró el Día mundial del Libro, que la UNESCO instituyó desde 1988 debido a que curiosamente, fue en 1616, el día en que me llevé a tres de los más brillantes escritores a nivel mundial: el español Miguel de Cervantes Saavedra, el ingles William Shakespeare y el peruano Garcilaso de la Vega, de los más prolíficos y reconocidos por sus extraordinarios trabajos literarios.
Pero eso no es lo triste, lo que me hace llorar es un dato que muchos ya saben pero que no acostumbran recordar y mucho menos mejorar y es, que cuando en países como Alemania sus habitantes leen mínimo 12 libros al año y España 7.5, en México solo ¡¡¡ 2.5 ¡!!
Y eso los que leen, (aunque déjenme decirles “que yo tenía otros datos” que eran de .5 libros al año) pero como quiera que sea, es ridículo, vergonzoso y tremendamente desilusionante que en un pías del que salen los mejores, técnicos, científicos, artistas, escritores y de más de lo mejor, no nos interese cuidar aspectos como éste, imagínense si así tienen de lo mejor, han pensado ¿Cómo sería si leyeran?
La tecnología es maravillosa, pero también ha colaborado grandemente a que ese poco gusto por la lectura se diluya aún más; los niños y los jóvenes pueden pasar 4 horas y muchas más diariamente en un video juego (hasta sillas especiales les hicieron para que pudieran jugar más tiempo).
Pero no son capaces de dedicarle 15 minutos al día a un buen libro que les permitirá transportarse a otras dimensiones, conocer personajes fantásticos reales o ficticios, mejorar su vocabulario y su ortografía entre otros muchos beneficios que les permitirán ampliar sus horizontes y no solo idiotizarse frente a un aparato electrónico y dañar sus columnas vertebrales y crearse callos en los dedos por decir lo menos.
Así que hoy les tengo dos propuestas: primero que tal si hacen un pequeño intercambio con sus hijos de restarle 15 minutos al jueguito en turno, por un libro y si no quieren tener el placer de pasar las hojas y el olor de un libro, pues al menos que lo hagan en sus aparatitos “inteligentes” al cabo que también hay libros electrónicos.
Y segundo, que me cuenten aquí y/o en mis redes, cual libro han leído últimamente y que les pareció, no se tal vez una pequeña semblanza (sin contarnos todo) que pueda invitar a otras personas que nos siguen, a leer lo que a ustedes les gustó. ¿Les late?
Bueno pues ahí me cuentan, los espero en la próxima porque ya saben: si no me leen … ¡voy por ustedes!
Actriz, Directora y Productora Teatral
@LIrredenta
