HACIENDO ADOBES/Miguel Zárate
El Congreso de Jalisco avaló la comparecencia del Secretario de Infraestructura del Gobierno del Estado. Será el 28 de octubre cuando David Zamora Bueno, deberá rendir un informe de las obras y proyectos de infraestructura financiados por los fondos del Programa Anual de Inversión Pública del año 2020.
Me parece elemental no pasar por alto la comparecencia del secretario porque este año el fondo de Inversión Pública le dio a su secretaría un monto superior a los 11 mil 500 millones de pesos; sin duda hay una cantidad basta de licitaciones y contratos que deben ser supervisados para dar certeza a la ciudadanía respecto al uso de los recursos públicos.
Sin embargo hay una segunda razón que quiero tratar en este espacio. Que tiene que ver con reactivar nuestra ciudad con proyectos de infraestructura. En mayo el Gobierno de Jalisco adquirió deuda por 6 mil 200 millones de pesos, mismos que serán pagaderos a 20 años con el dinero de las y los jaliscienses.
En ese momento el ejecutivo estatal maniobró el presupuesto para reorientar recursos etiquetados a infraestructura hacia la reactivación económica, con la promesa de inyectar los más de 6 mil millones en obra pública que, en México se traduce en creación de empleos y circulación de la economía.
El meollo del asunto es que la ciudadanía ha visto poco o nada de ese dinero, directamente en sus municipios. La razón radica en la pasividad de las administraciones municipales, que al menos en el Área Metropolitana de Guadalajara, donde habitamos el 75% de las y los jaliscienses, incluso cuando a Guadalajara y Zapopan se le mandan bolsas especiales de este recurso no se cuenta con un informe de cómo y con cuánto dinero se beneficiará su demarcación.
Guadalajara hoy está marcada por la quiebra de negocios, empresas y toda clase de proyectos a los que la gente le apostó todo lo que tenía y lo cierto es que no hay señales visibles de los grandes proyectos de infraestructura que urgen para reanimar la economía de los municipios.
Si queremos ver de vuelta la estabilidad económica de nuestra ciudad, y además resolver los grandes problemas como la inseguridad en las calles y las carencias en los servicios públicos municipales, algo que las y los diputados deberán preguntar al secretario de infraestructura es dónde están esos proyectos de obra pública. Mientras que la ciudadanía debe exigir a los gobiernos que se ponga en marcha una reactivación económica impulsada por proyectos de obra pública. Esto es todo por hoy.
Nos leemos en la próxima.
