El gobierno dejó a su suerte a los trabajadores de la salud

 

PERSPECTIVA21Verónica Juárez Piña

Trabajadores del IMSS, ISSSTE y de la SSA, recién integrados en la Unión Nacional de Trabajadores por la Salud de México, anunciaron un paro activo de labores a partir del 25 de mayo en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER); en demanda de un mayor apoyo del Gobierno Federal en la lucha que libran en los hospitales contra la pandemia del COVID-19. Adicionalmente, anunciaron una movilización nacional para el 1 de julio.

Solicitaron más equipo y de mayor calidad; así como mejores condiciones en sus centros de trabajo para evitar que más personal médico, enfermeras, técnicos, y personal administrativo, se siga contagiado y falleciendo de Coronavirus.

De acuerdo con la Secretaría de Salud hasta el 19 de mayo habían fallecido 149 trabajadores del IMSS, ISSSTE y SSA; y 11 mil 394 casos confirmados acumulados, dos mil 790 activos, ocho mil 275 sospechosos y 29 mil 634 negativos.

De igual manera, han tenido lugar diversas movilizaciones de protesta en varias ciudades ante la entrega tardía y la mala calidad de los equipos que les han sido proporcionados por parte de las autoridades federales de salud.

Los trabajadores solicitaron reconocimiento de la incapacidad otorgada al trabajador contagiado por COVID-19 o la lamentable muerte por COVID-19 como riesgo de trabajo y no como enfermedad general, dentro de las instituciones de salud.

A fin de que el pago de dicha incapacidad o indemnización sea al 100%, y no catalogada a beneficio del ahorro o desvío de los fondos designados en el presupuesto para amparar o indemnizar al trabajador.

Demandaron para cada uno de los trabajadores de la salud del país -que estén en contacto con paciente COVID-19-, el equipo de protección personal, EPP, el cual consta de: Bata médica, guantes de examinación, estériles, overol tipo Tyvek, guantes de examinación, no estériles, guantes para limpieza, mascarilla médica quirúrgica, protección ocular (googles), protección facial (careta) y respirador (N95/PPF2) como describe las especificaciones técnicas de dispositivos médicos para la gestión de casos de COVID-19 en los servicios de salud, de acuerdo a la

O.P.S. Organización Panamericana de la Salud y O.M.S., Organización Mundial de la Salud.

Así como una revisión constante de áreas de trabajo, sanitación de zonas insalubres, instauración de protocolos y adecuación de zonas de patología, anfiteatros y tráileres frigoríficos donde sea necesario.

Y que quede registrado en los reportes a las comisiones mixtas de Seguridad e Higiene, para fines correctivos las irregularidades en instalaciones, equipos, que puedan motivar algún riesgo, y así puedan hacerse las demostraciones por parte de las autoridades, como indicio de que han estado actuando al respecto estuvieron y se mantienen pendiente de las mismas. Y presencia constante de las mismas comisiones.

Las y los diputados del PRD reiteramos nuestra exigencia al Gobierno Federal y a las autoridades del sector que atiendan las peticiones de los trabajadores de salud; pues son quienes están en la primera línea de combate a la pandemia y hasta el momento no se les ha proporcionada el equipo suficiente y de la calidad necesaria.

Si bien es correcto que el Gobierno Federal reconozca su compromiso durante la pandemia con la entrega a médicos y enfermeras de la condecoración Miguel Hidalgo, que estará acompañado con estímulos económicos; lo que los trabajadores requieren de las autoridades es que se les proporcione el equipo necesario, se les regularicen sus contratos y su salario, se mejoren las condiciones de los hospitales COVID, y se les otorgue la protección adecuada para no ser víctima de agresiones; a fin de que ellos puedan mejorar la atención que le brindan a los pacientes.

La crítica situación en que se encuentra el personal que enfrenta la pandemia, obedece al drástico recorte aplicado al sector salud, la reacción tardía del Gobierno Federal, la decisión presidencial de canalizar más recursos públicos a los megaproyectos en lugar de a los hospitales y la tardanza en la entrega de equipo de protección y la mala calidad del mismo.

Es absolutamente reprobable que por el “austericidio”, las omisiones y negligencia de las autoridades, hasta el momento 149 trabajadores de la salud hayan fallecido y miles de ellos resultado contagiados de Coronavirus. En los hechos, el Gobierno Federal los dejó a su suerte.

Coordinadora del GPPRD en el Congreso de la Unión

@juarezvero

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